Análisis

Cuando explotó Amuay, el primer gran aviso del colapso de PDVSA

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Cuando explotó Amuay, el primer gran aviso del colapso de PDVSA

El incidente estuvo antecedido por un incremento de incendios en las instalaciones petroleras y revelaron el ocaso que se avecinaba en la principal industria venezolana.

Redacción | Primer Informe

Hace 8 años se produjo la gran  explosión en el Complejo Refinador Paraguaná (CRP), específicamente en la Refinería de Amuay). Ese hecho marcó el inicio del declive petrolero de Venezuela.

Según  los informes oficiales del momento, la explosión causó la muerte a 42 personas. Otras 150 resultaron heridas. Entonces, tanto Chávez como Rafael Ramírez, para el momento presidente de PDVSA, fueron bastante parcos y cuidadosos en dar información sobre el incidente.

Hubo que esperar un año e informes independientes, como el realizado por la Centro de Orientación en Energía (Coener), para establecer un estimado de los daños materiales que se calcularon en 1.800 millones de dólares.

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A eso se suman pérdidas de 1.200 millones de dólares producto de la inoperatividad de la refinería de Amuay posterior al incidente.

Indolencia por las víctimas

Las pérdidas humanas fueron desestimadas por Chávez unos días después cuando en una visita a la zona de la refinería dijo: “Algún filósofo dijo, no me acuerdo quién: la función debe continuar, con nuestros dolores, nuestros pesares y nuestros muertos”.

Entonces, ni siquiera se había sofocado el incendio.

Además de los daños materiales causados por la explosión, PDVSA incurrió en pérdidas debido a la paralización de sus operaciones de refinación en Amuay. Las llamas tardaron días en ser controladas.

Rafael Ramírez, a la cabeza de la industria petrolera, esperó más de un año para pronunciarse sobre el incidente de forma oficial. Según el informe final del incendio presentado por Ramírez cuando todavía era ministro de Petróleo, la fallad de la refinería fue “inducida e intencional”.

Alguien habría «aflojado» los pernos que debían sujetar una de las bombas verticales ( la identificada como la 2601) al terreno para prevenir escapes, explicó Ramírez en spetiembre de 2013.

Lo que dijo el informe independiente

De acuerdo con la investigación del Coener, La causa de la explosión fue «la ignición de una nube de gas creada por un escape incontrolado de olefinas (componentes inflamables producidos en el proceso de refinación), cuya causa más probable fue el colapso del sello mecánico de una o más de las bombas P-200 A/B/C, ubicadas al pie de las esferas TK 208 y 209, en el área de almacenamiento del Bloque B23 de la Refinería Amuay. La referida nube de gas se esparció en un área extensa, originando el fenómeno denominado ‘explosión de una nube de gas en un espacio no confinado'».

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Chávez intentó restarle importancia a las muertes ocasionadas por la explosión de Amuay y tildó cualquier pedido de transparencia en la investigación del incidente como una manipulación política.

Otros  hallazgos del informe del Centro de Orientación de Energía son los siguientes:

  • De acuerdo a testimonios de vecinos de la zona, así como por mensajes y declaraciones de trabajadores y responsables de una de las empresas privadas afectadas por la explosión e incendio, se determinó la presencia de gas en el ambiente varias horas antes de la explosión.
  • Según las declaraciones y los registros de actuación del personal de la Refinería, se confirmó la presencia de una fuga incontrolada de gas en el Bloque 23, aproximadamente a las 12 de la noche del día viernes 24 de agosto de 2012. Sin embargo, no se activaron alarmas ni se tiene conocimiento de acción alguna para llevar a cabo el desalojo de las áreas adyacentes.
  • Las únicas acciones que se tomaron consistieron en tratar de bloquear válvulas y equipos en forma manual en sitio de la fuga. Ninguna de esas maniobras funcionó debido a la magnitud del escape y las altas concentraciones de gas en el ambiente.
  • Durante 2011 los informes de la empresa aseguradora de PDVSA documentaron la ocurrencia de aproximadamente 100 incendios en el Complejo Refinador Paraguaná. Los incidentes no eran investigados oportunamente.
  • Los indicadores de accidentalidad de PDVSA mostraban  una tendencia creciente en los años previos al accidente. Las cifras eran significativamente altas y muy superiores a los promedios internacionales.
  • El incendio se extendió hacia varios de los tanques de hidrocarburos líquidos del área del Bloque 23 y 24. Se presumen que los tanques que contenían hidrocarburos tenían sellos mecánicos defectuosos en los techos flotantes. También se sospecha falta de enfriamiento oportuno de los tanques que se encontraban en los alrededores del área afectada.
  • Las acciones y medidas tomadas en la zona por parte de PDVSA reflejaron un manejo inadecuado de la contingencia.  Se falló en todo: durante la operación de detección de la fuga de gas antes de la explosión, posterior control y extinción del incendio y atención de las personas afectadas.
  • Las fallas detectadas en el plan de evacuación probablemente hayan incidido en el incremento del número de víctimas.

 

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