Expansionismo ruso de Putin echa raíces en África
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Establecimiento de una base naval en el extranjero por primera vez desde el colapso de la Unión Soviética marca una nueva etapa en la política exterior de Moscú.
Redacción | Primer Informe
El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó al Ministerio de Defensa de su país firmar un acuerdo con Sudán. La finalidad del tratado es establecer una presencia militar permanente en el continente africano y dar continuidad al expansionismo ruso de Putin.
Esta sería la segunda base naval rusa en todo el mundo. Y se encuentra en una región que se ha vuelto cada vez más importante para Moscú.
Por ahora, el acuerdo solo prevé una base logística y de reparación en el Mar Rojo. La marina rusa podrá estacionar hasta 300 militares en el lugar. Suficiente personal para atender a cuatro buques de guerra, de propulsión regular y nuclear.
El combate a la piratería en la región del Cuerno de África es una de la excusas para justificar la presencia militar rusa en la zona. Así dijo el almirante Viktor Kravchenko, exjefe de personal de la marina de ese país.
«Es necesaria una presencia naval rusa allí», declaro al medio DW. Las palabras dan a entender que la instalación podría algún día convertirse en una base militar convencional.
La movida también sirve a Moscú en su propósito de cultivar la imagen de una potencia mundial.
«Rusia se define a sí misma como un jugador en el lugar en esta importante región del mundo», dijo a DW Rolf Welberts, un ex embajador alemán en Sudán.
Rusia ya estableció en América Latina una cabeza de playa. La Venezuela chavista ha recibido asesores militares rusos. Sin embargo, el régimen de Maduro nunca ha establecido una posición oficial clara sobre las actividades del personal militar de Moscú en el país.
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Ya Estados Unidos, Francia y China tienen bases navales en Djibouti en el Mar Rojo. Según los medios, Rusia también ha mostrado interés.
Supremacía rusa en África
Además del prestigio, Rusia también podría estar detrás de la extracción de materias primas en Sudán.
Su presencia allí también le daría el poder de «cortar las rutas comerciales en caso de conflicto con Occidente», dijo a Alexander Golz, un periodista militar ruso.
La Unión Soviética tenía puestos de avanzada en Etiopía y Somalia para contrarrestar el hecho de que Estados Unidos tenía una base naval en el Océano Índico.
Hoy, parece que el Mar Rojo es importante como región y punto de acceso al continente africano para Rusia.
«El Mar Rojo se ha convertido en un foco geopolítico», dijo Annette Weber, del Instituto Alemán de Asuntos Internacionales y de Seguridad con sede en Berlín. L
a guerra en Yemen, en la que están involucrados varios países de la región, incluido Sudán, fue un punto de partida, dijo.
«Es un trato fantástico para Rusia» que ha fortalecido su influencia, dijo Weber. El experto describió a Sudán como «extremadamente importante» en términos de comercio, contrabando y rutas de escape.
El expansionismo ruso de Putin ve a Sudán como un trampolín en la región. Se han visto asesores militares y mercenarios en al menos dos países vecinos: Libia y la República Centroafricana.
Eso parece ser parte de la estrategia de Rusia de establecer nuevos lazos con aliados de la era soviética.
Con información de DW.
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